El varón de hoy corre el peligro de desperdiciar su vida entre pantallas, vicios y distracciones. Se le ha convencido de que vivir es “pasarla bien”, pero el corazón masculino fue creado para misiones grandes. Fuiste hecho para edificar una familia, para proteger la verdad, para dejar huella en las almas. Nada de eso se logra desde el sofá. Tu vida no es un juego. Es una vocación. Y cada día que desperdicias, alguien más sufre por tu ausencia. Levántate, varón. No fuiste creado para entretenerte. Fuiste creado para dar la vida.
miércoles, 23 de julio de 2025
lunes, 14 de julio de 2025
QUIEN TE CURA ES JESÚS, NO EL TIEMPO
viernes, 11 de julio de 2025
11 de julio de 1943
🕯️ Recordamos.
Hoy se conmemora el llamado Domingo Sangriento, la culminación de la Masacre de Volinia. El 11 de julio de 1943, unidades de la UPA atacaron más de 90 aldeas polacas y asesinaron a miles de civiles indefensos: mujeres, niños, ancianos y familias enteras.
Murieron simplemente por ser polacos.
Se quemaron iglesias y se asesinó a personas durante misas con una crueldad extraordinaria. Decenas de miles de nuestros compatriotas murieron de una forma indescriptible.
No hubo guerra, fue una limpieza étnica.
📌 Hoy no exigimos venganza, exigimos verdad, memoria y dignidad para las víctimas.
Porque sin memoria, no hay identidad.
Porque sin verdad, no hay reconciliación.
Honremos su memoria.
jueves, 10 de julio de 2025
miércoles, 9 de julio de 2025
Las personas de bien: desafían embaucadores.
Las personas de bien: desafían embaucadores.
Personas de bien
Desafían embaucadores.
sábado, 5 de julio de 2025
miércoles, 2 de julio de 2025
La psicología, como ciencia que estudia la conducta, la afectividad, la motivación, el pensamiento y las relaciones humanas, no es neutral, nunca lo ha sido. Toda práctica psicológica está sostenida por una visión del hombre, aunque muchos no lo reconozcan. Quien piensa que el hombre es solo cuerpo, reducirá sus problemas a mecanismos biológicos o químicos. Quien cree que todo es subjetivo, negará la verdad objetiva, y convertirá la terapia en una reafirmación de deseos. Pero el psicólogo católico no puede caer en esa trampa. Su labor no es simplemente hacer que el otro "se sienta mejor", sino ayudarlo a vivir mejor, es decir, conforme a la verdad de su ser, a la ley natural y al propósito para el que fue creado.
Tener una antropología cristiana clara significa saber que el ser humano es cuerpo y alma, creado a imagen y semejanza de Dios, llamado a la comunión y destinado a la eternidad. Significa reconocer que hay un orden moral objetivo que guía su vida afectiva, que su libertad no es absoluta sino orientada al bien, y que el sufrimiento no siempre es un mal a evitar, sino muchas veces una ocasión para madurar, redimirse y crecer.
Sin este fundamento, un psicólogo puede caer fácilmente en terapias que refuercen el egoísmo, que nieguen el pecado, que justifiquen el desorden, que relativicen la culpa, que aplaudan elecciones contrarias a la ley de Dios, o que mutilen la dimensión espiritual de la persona. Lo hemos visto en muchos enfoques terapéuticos modernos que niegan la diferencia sexual, promueven la autoindulgencia, justifican el vicio y celebran el hedonismo. Un psicólogo que no se forma bien, termina absorbiendo esos errores, aunque sin quererlo, y los transmite a sus pacientes.
Por eso, un psicólogo católico debe estudiar profundamente a Santo Tomás de Aquino, la antropología perenne, la teología fundamental, la doctrina moral y la espiritualidad cristiana. No para convertir la terapia en un sermón, sino para tener una brújula interior que lo mantenga firme en medio de tantos modelos terapéuticos confusos.