Diferenciar entre el tiempo psicológico y el tiempo espiritual.
El tiempo psicológico es el tiempo cerebral*, el que nos representamos, calculamos y repartimos en horas y días; el que intentamos manejar y programar. Ese tiempo que siempre nos falta y del que nunca tenemos suficiente; el tiempo que, o bien pasa demasiado deprisa, o bien demasiado despacio, y que precisamente medimos en términos de rendimiento.
En cambio, tiempo para el espíritu es el tiempo de Dios, es el que por la gracia conduce nuestra vida a su más profundo nivel.
Jesús se apartaba en lugares solitarios, descansaba haciendo cosas diferentes, departiendo, encontrándose con los demás y principalmente en diálogo con el Padre.
Buscaba y encontraba el tiempo del espíritu. Un tiempo, que si nos esforzamos, lo encontraremos también nosotros siempre, en cualquier lugar y circunstancias.
De lo contrario, el tiempo psicológico lo abarcara todo, viniendo la quiebra, el vacío, el cansancio total… el cansancio de nosotros mismos.
Venid a mí, todos los que estáis cansados y cargados, y yo os haré descansar.
Descansar para contemplar un mundo en el que habita un amor infinito, sin el cual, no sería todo tan bello.
O. A.
* Es también el tiempo sensible (lo que siento) (yo, yo, yo, yo...)
TRES AÑOS CUMPLIDOS !!!!
Hace 11 años
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